La Policía ha detenido a los implicados y se han invalidado los exámenes de los impostores
Un ciudadano chino ha sido detenido en Barcelona porque hacía uso de la tecnología para ayudar a que sus conciudadanos aprobaran el examen teórico del carné de conducir.
No era necesario que supieran español. El cabecilla de la banda escondía una cámara entre la ropa del examinado y le colocaba un receptor en el oído. Con este dispositivo podía ver a distancia las preguntas del cuestionario y le facilitaba, a través del pinganillo, la respuesta correcta. El grupo se encontraba escondido en una furgoneta cerca del centro de exámenes.
Este engaño fue descubierto después de que uno de los aspirantes a conductor se restregara mucho la oreja, este hecho originó sospechas en un examinador. El aspirante fue registrado y le descubrieron la cámara. Más tarde, fue la Policía quien inició una investigación que ha finalizado con la detención de la banda y la invalidación de los exámenes de los farsantes.
Fuente: elperiodico.com