Tener ansiedad o miedo a conducir es más habitual de lo normal. Cuando los síntomas se acentúan pueden llegar a convertirse en un trastorno conocido como amaxofobia. 1 de cada 4 conductores sufren esta fobia a conducir, la necesidad de conducir para realizar una actividad laboral u otras obligaciones hacen que los conductores con amaxofobia tengan que enfrentarse a ella diariamente. ¿No conocías este término? En nuestro artículo te contamos cuáles son sus síntomas y cómo superarla. ¡Allá vamos!
¿Qué síntomas tiene la amaxofobia?
En primer lugar, no debemos confundir esta fobia con situaciones de nerviosismo por falta de seguridad o ante situaciones poco habituales como circular por autovía, encontrarse con condiciones meteorológicas adversas o algún que otro imprevisto en la carretera.
El miedo a conducir es mucho más complejo. La amaxofobia tiene consecuencias en la vida social y profesional de los conductores que la sufren: pueden llegar a perder oportunidades laborales, cancelan planes o evitan circunstancias en las que tengan que coger el coche.
Los principales síntomas de esta fobia a conducir son:
- Taquicardia y palpitaciones
- Dolor de estómago y dolores musculares
- Mareos, náuseas y temblores
- Pensamientos catastróficos
- Falta de aire
- Entumecimiento de extremidades
- Pesadillas e insomnios previos al viaje
- Alteraciones en el apetito
Miedo a conducir: cuáles son sus causas
Las causas por las que las personas sufren fobia a conducir pueden ser muy variadas. Las más habituales suelen ser:
Sufrir un accidente de tráfico
Pasar por una situación traumática en carretera suele ser una de las principales causas por las que los conductores empiezan a tener ansiedad al conducir.
Lugares nuevos que no controlamos
Cuando los conductores que conducen por lugares habituales se enfrentan a una situación nueva pueden provocar una fuerte tensión que conlleva miedo e imposibilidad de ponerse frente al volante.
Predisposición médica a la ansiedad
Autoestima baja
Podría sonar raro pero la percepción negativa de uno mismo y de las situaciones que nos rodean pueden provocar inseguridad y miedos a la hora de conducir.
Recibir críticas constantes acerca de nuestra manera de conducir
Las críticas constantes o burlas por parte de otras personas, unida a una autoestima baja, pueden generar un estado de inseguridad que tenga como consecuencia un rechazo por ponerse al volante.
¿La amaxofobia tiene tratamiento?
La respuesta es sí, la amaxofobia tiene tratamiento. Para perder el miedo a conducir existen diferentes técnicas y consejos que ayudan a recuperar la sensación de seguridad y tranquilidad al volante.
Contar con un avance progresivo donde nos enfrentemos a las situaciones poco a poco nos ayudará a combatir ese miedo a conducir. Para ello, la mejor opción es contar con clases adicionales de autoescuela que, de la mano de un profesional, ayuden a enfrentar desde los recorridos más sencillos y controlados hasta situaciones más dificultosas.
Además, contar con clases adicionales permitirá mejorar las habilidades de conducción y, con ello, sentir más seguridad y confianza.
Las técnicas de relajación como el mindfullness pueden ser de gran ayuda para potenciar la concentración al volante y evitar que el miedo nos invada.
Cuando el miedo a conducir y la ansiedad nos paralizan por completo y nos es imposible entrar en el vehículo, lo ideal es acudir a un profesional especializado. La terapia psicológica especializada puede resultar muy efectiva en los casos más extremos y será, junto con las clases adicionales, el paso definitivo para poder hacer desaparecer esa fobia a conducir.
En Autoescuelas Fran Velasco llevamos más de 60 años ayudando a conseguir todo tipo de permisos de conducir. Nuestros profesores son expertos en ayudar a cada conductor en aumentar su seguridad frente al volante y mejorar sus habilidades. ¡Te ayudamos!